La película ganadora es de apenas 2 minutos de duración y fue inspirada por el sentir de Ian, de que la educación no debería ser tomada como algo sobreentendido. Cuando faltan las oportunidades de educación, demasiados estudiantes dejan el colegio – igual como los niños trabajadores en Guatemala, que a temprana edad toman un oficio para pagar su educación y para apoyar a su familia. El cortometraje muestra la brecha entre los estudiantes en EE.UU., donde la educación se toma por un hecho y un limpiavidrios en Guatemala que sueña con ir al colegio para un día ser profesor.
“El cortometraje enfoca una problemática preocupante del sistema de educación en Estados Unidos: una carencia en el enfoque del trabajo escolar hecho por los estudiantes”, comenta el presidente del proyecto “Strong American Schools” (Colegios fuertes en Estados Unidos) Roy Romer. Según él, es necesario aumentar la asistencia de los alumnos a sus clases y cuidar más el tiempo de estudio.
En el concurso FYI 08 y en sus diez categorías participaron más de 500 trabajos de jóvenes entre 14 y 24 años de edad.
reportaje: jo mayr noticiasypunto
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